Diferencia entre fauno y sátiro

Si eres un fan de la mitología, probablemente ya habrás leído acerca de diferentes criaturas míticas. Todas las culturas tienen sus mitos, pero sin duda la mitología griega presenta diversas y sorprendentes criaturas que en su mayoría son producto de una cultura con gran imaginación.

¿Sabían que las ninfas tienen diferentes variedades dependiendo del lugar en donde viven? Hay ninfas del bosque llamadas dríades, de los ríos, conocidas como náyades e incluso están las sílfides, que son del aire. En fin, la mitología griega está llena de un montón de otros coloridos y desconcertantes personajes como Pegaso, el caballo alado que es blanco y brillante, nacido según el mito; de la sangre de Medusa. También están las quimeras y la hidra, monstruos viles que podían devorar a más de uno.

Pero entre todos estos personajes también están los faunos y los sátiros, los cuales en muchos casos la gente suele confundir por estar relacionados con el culto al dios del vino Baco o Dionisio; personaje que ama el bosque, todo lo verde y la vida.

Los sátiros en realidad son criaturas míticas presentes en la antigua cultura y literatura griega. A menudo se les describe como mitad hombre y mitad cabra. Si recuerdas la película de Disney, Hércules, el mentor del héroe es un sátiro. Si has visto la película ya tienes una idea más clara de lo que es un sátiro. Por otra parte,  los faunos pertenecen más a la tradición romana. Son mitad hombre y mitad ciervo. Por supuesto, ambos tienen cuernos, pero sus personalidades son muy diferentes.

Los sátiros se caracterizan por una actitud más lasciva, vulgar, cruda y subida de tono. Solían ser desagradables para algunas personas u otras criaturas. Por otro lado, los faunos se describen como seres con más finura, estilo, gracia y elegancia. En realidad, son más favorecidos por los romanos.

En los textos originales, los faunos tienen patas que los asemejan a los humanos; Sin embargo, los sátiros se representaban con pezuñas en lugar de patas de cabra.

Baco o Dionisio, el dios del vino, era acompañado generalmente por los sátiros. Como Baco, los sátiros eran conocidos por ser más agresivos, así como también por su mayor inclinación a los placeres sexuales en comparación con los faunos. Ambos, sin embargo, son vistos como habitantes de los bosques y a la vez aficionados a los árboles y la madera en particular.

Para los romanos, los faunos eran vistos como una encarnación del miedo, especialmente cuando se viajaba o visitaban lejanos bosques inexplorados.

Los faunos, siendo en parte ciervos, tenían cuernos gráciles naturales. Sin embargo, como los sátiros, debían ganárselos dolorosamente y con trabajo. Para ganarlos era necesario hacer una buena acción o ser favorecidos por los dioses.

Cuando se comparan los aspectos o apariencias físicas, los sátiros son menos guapos que sus contrapartes los faunos. A menudo, los faunos son considerados como más delicados e inocentes. Más encantadores y atractivos a la vista. Sátiros son generalmente retratados como seres torpes e ineptos, con mucho pelo y ojos pequeños; además de una enorme boca. Eran esclavos de la gula, la bebida y el libertinaje; contrariamente a los faunos que eran más refinados.

Los faunos también eran considerados genios, talentosos y más eficientes. Mientras que los sátiros son descritos como tontos, ingenuos, pícaros y sinverguenzas.

En algunas películas famosas de Hollywood se han presentado y se incorporan faunos y sátiros. Como en Las Crónicas de Narnia, El Laberinto del Fauno y en Percy Jackson.