Diferencia entre dormir y soñar
|Los sueños y la razón de porqué dormimos siempre han despertado la curiosidad de más de un estudioso. Desde la antigüedad ha existido un especial interés por los sueños y el significado de los mismos, hasta tal punto de que algunos les atribuyen cualidades sobrenaturales y místicas.
Con el paso del tiempo, algunas creencias asociadas a los actos de dormir y soñar han mermado considerablemente; en parte debido a que en el siglo pasado los científicos progresaron significativamente en cuanto al estudio de los factores que nos hacen dormir, así como también de los que nos hacen soñar.
Ahora bien, debido a la estrecha relación entre estos dos términos hay más de uno que se confunde al momento de entender qué es lo que los hace diferentes. Si tú también tienes dudas al respecto o simplemente quieres un poco más de información, continúa leyendo, porque a continuación te explicamos cuál es la diferencia entre soñar y dormir.
Dormir
Dormir es una de las necesidades básicas de los seres humanos y muchos otros seres vivos, tanto así que se puede morir por falta de sueño. Desde siempre esta actividad ha intrigado a las personas por ser muchas veces considerada como la experiencia más cercana a la muere que se puede apreciar estando con vida.
Dormimos porque una serie de factores lo provocan, como son los neurotransmisores, por ejemplo. Cuando estamos durmiendo nuestro cuerpo se encuentra en estado de reposo y no somos claramente conscientes de lo que pasa a nuestro alrededor. Todo nuestro sistema nervioso reduce el grado con que ejecuta sus actividades.
En los seres humanos, el sueño consta de cuatro etapas; las cuales se definen por el grado de «profundidad» del mismo o; dicho de otra forma, de qué tan insensibles nos encontramos a los estímulos exteriores. Las tres primeras fases corresponde al NMOR o sueño ligero, mientras que la cuarta y última fase se conoce como MOR o Movimientos Oculares Rápidos.
Soñar
Por otra parte, el asunto de los sueños y su estudio es un poco más subjetivo; aunque científicamente se han podido explicar algunos elementos o fenómenos relacionados con los mismos.
A diario escuchamos a las personas hablando de los sueños o las pesadillas que tuvieron la noche anterior. Algunos dicen soñar con que algo los persigue, otros sueñan que están volando y, también hay personas que suelen tener sueños con muertos. Con relación a este último caso, se observa que a veces algunos individuos atribuyen a este tipo de sueños influencias que van más allá de las que en realidad tienen.
Lo que nos sucede cuando estamos despiertos es lo que en mayor medida contribuye al contenido de nuestros sueños, por eso es imposible soñar con personas que nunca hayamos visto; asimismo, nuestra edad y género juegan un papel importante en este proceso.
Finalmente, nuestros sueños enfatizan percepciones visuales y emociones a expensas del razonamiento y la lógica. Aunque a veces creamos controlarlos, lo cierto es que los sueños son involuntarios y mientras los tenemos no disponemos de nuestras capacidades de juzgar, reflexionar y pensar como lo hacemos cuando estamos plenamente conscientes.