Diferencia entre ansiedad y depresión

Tanto la ansiedad como la depresión son condiciones médicas con las que cada día un mayor número de personas tiene que aprender a vivir. Las causas de ambas no están del todo claras, sin embargo, no cabe duda de que factores tanto genéticos como ambientales pueden contribuir al desarrollo de las mismas.

Aunque no es común que se suelan confundir estas dos condiciones, aquellos que no tienen conocimiento acerca de estos problemas pueden tener dudas acerca de cuál es la diferencia entre depresión y ansiedad.

Si también tienes dudas al respecto o simplemente andas en busca de un poco más de información que sirva para complementar lo que ya sabes, entonces continua leyendo, porque más abajo te explicamos todo lo que necesitas saber en torno a este interesante tema.

Ansiedad

La ansiedad se presenta como respuesta ante un estresor (interno o externo) y los episodios pueden ser de corta duración, incluso puede manifestarse en personas consideradas sanas.

Las personas se sienten ansiosas cuando están estresadas, por ejemplo, cuando tienen que tomar una prueba o dar una entrevista; sin embargo, hay casos en los que el estresor no es tan obvio y además la ansiedad se hace persistente.

Puede describirse como un sentimiento de preocupación, miedo e inseguridad; que puede estar arraigado en cualquier evento que haga sentir frustrado, enojado o nervioso al individuo. En pequeñas dosis, la ansiedad es normal, útil y hasta saludable porque mantiene a la persona en alerta para que pueda lidiar con aquello que le causa estrés. Por lo general, una vez que el estresor desaparece la ansiedad se va con él; pero no siempre es así y cuando no sucede de esta manera, entonces es probable que se trate de un trastorno de ansiedad.

Hay varios tipos de ansiedad, entre ellas: ansiedad existencial, ansiedad ante pruebas y desempeño, ansiedad social, ansiedad generalizada, entre muchas más.

Los síntomas más comunes cuando este problema se convierte en una condición médica son: aumento de la presión sanguínea, latidos del corazón omitidos, respiración rápida, sudor frío, náusea, temblores y mareos. Si la ansiedad empeora, entonces es posible que aparezcan otros síntomas como diarrea, aumento de frecuencia al orinar, boca seca y dificultad para tragar.

Es común que las personas con serios problemas de ansiedad también experimenten depresión. Cambios importantes en la vida pueden desencadenar episodios de ansiedad, como por ejemplo, un matrimonio o divorcio, mudanza, un nuevo trabajo, tener un hijo, entre otras cosas.

Depresión

Por otra parte, la depresión es definida como una estado de decaimiento y aversión a las actividades que antes resultaban placenteras; en muchos casos puede incluir sentimientos de profunda tristeza, sin embargo, no en todas las personas se presenta igual.

La causa más común de la depresión es un desbalance bioquímico en el cerebro que interviene con la habilidad de las células nerviosas o neuronas de comunicarse entre sí. Dichas células se comunican por medio de los neurotransmisores, que son en gran parte responsables de mantener el estado de ánimo de las personas. Cuando hay una deficiencia en estos químicos, la persona experimenta depresión.

ansiedad y depresion
ansiedad y depresion

Finalmente, hay varios tipos de depresión, por ejemplo: depresión clínica, depresión crónica, depresión atípica, depresión bipolar, estacional y psicótica. Algunos afectados deben incluso tomar medicamentos para controlar el desbalance.

Los siguientes son síntomas típicos de depresión: poca energía, pérdida de interés en actividades antes placenteras, cambios en el apetito, excesivo sueño o insomnio, sentimientos de vacío y soledad y dificultad para concentrarse. Es bueno aclarar que el estrés continuo puede llevar a la depresión, de ahí que tantas personas con trastornos de ansiedad también sufran de depresión.